Antes de empezar DMT no tenía la percepción de cuáles pudieran ser los aspectos de mi cotidianidad sobre los que podría aplicarme para mejorar mi actitud en la vida que llevo. Trabajo en una multinacional y suelo tener ritmos de trabajo bastante fuertes y con presiones y eso suele comprometer mis espacios personales y mi serenidad interior. El título del curso me ha fascinado mucho desde el principio, porque literalmente me transmitía un sentimiento positivo. De hecho, ha sido un crecimiento de reflexiones sobre mi misma, sobre mis propias actitudes, para acabar llevándome a enfocar y concretizar acciones que mejoran mi vida.
El curso está perfectamente estructurado y completo, con todos los temas necesarios para un recorrido interior y personal pero también práctico y concreto con ejercicios y meditación.
DMT está hecho con un nivel muy alto de profesionalidad y ofrece instrumentos completos e ideales también para gente con poco tiempo libre.
Cualquier persona, trabajadora o no, necesitaría pararse un momento a reflexionar sobre sus propias actitudes en la vida o mejor dicho «conectar con su interior».
Me gustaría acabar con la siguiente frase que está citada en el mismo curso: «La vida se comprende mirando hacia atrás y se vive mirando hacia adelate» S. Kierkegaard.